FALLECE EL SALESIANO D. MIGUEL MORENO


A las tres de la tarde de hoy ha fallecido en la Casa Salesiana "Pedro Ricaldone" de Sevilla a los 74 años el salesiano D. Miguel Moreno Gutiérrez, que fue director de la Casa Salesiana de Alcalá y director espiritual de nuestra Hermandad entre septiembre de 1987 y junio de 1996. El sepelio tendrá lugar mañana jueves 29 a las 10 de la mañana en la Parroquia de San Juan Bautista de La Palma del Condado, Huelva, donde ejerció como director en sus últimos años.
La Hermandad asistirá al sepelio representada por nuestro Hermano Mayor y su Teniente.

Don Miguel nació en Chiclana (Cádiz) el día 17 de mayo de 1939. Atraído por D. Bosco, hizo su primera profesión religiosa el día 16 de agosto de 1958, y el 11 de julio de 1964  la profesión perpetua. El 20 de abril de 1968 fue ordenado sacerdote en Sanlúcar la Mayor por el cardenal Bueno Monreal. Desde entonces pasó por las casas salesianas de Sevilla-Universidad Laboral, Puebla de la Calzada, Mérida, La Línea de la Concepción,  Alcalá de Guadaíra, Rota, Huelva, La Palma del Condado, Morón y finalmente Sevilla-Pedro Ricaldone. En estos años asumió varias responsabilidades como consejero, párroco, coordinador de pastoral y director.

Toda una vida dedicada a los jóvenes, siguiendo el carisma de Don Bosco. La alegría, la fiesta, la sonrisa, el entusiasmo, la creatividad, la diversión... fueron la constante en su forma de hacer presente su ser salesiano. Durante sus años como director se celebraron importantes acontecimientos como el Centenario de la muerte de D. Bosco (1988), el 75 aniversario del Colegio (1989), el XXV aniversario de la fundación de la Hermandad (1990), la visita del Rector Mayor D. Egidio Viganó (1993) o el XXV aniversario de su propia ordenación sacerdotal (1994). Pero lo más importante es que D. Miguel caló en el corazón de los alcalareños con su alegría y cercanía. La Hermandad guarda un grato recuerdo de sus años como director espiritual.

Tras superar una importante operación quirúrgica el pasado mes de diciembre, la enfermedad ha ido empeorando hasta su fatal desenlace. Damos gracias a Dios y a María Santísima del Rosario, Auxiliadora nuestra, por este gran salesiano.

Descanse en paz.